Vivir una vida propia es un gran desafío para el ser humano. Emprender el proceso de ir descubriendo todo lo que está tapando nuestra verdadera esencia requiere de un gran respeto por la propia existencia. Y atreverse a soltarlo, requiere una gran valentía.
Es madura la persona que imprime en este mundo la huella más personal de su vida, en lugar de limitarse a seguir las huellas de los demás.
Anselm Grün